Tal vez tienes una amiga que es brutalmente hábil en lo que a regalos se refiere. Es esa clase de personas que intuyen a velocidades desconocidas el modo de hacer sonreír a sus amigos, y que encuentran también el tiempo y las fuerzas para lograrlo. ¿Qué piensas hacer tú por desarrollar este talento tan estimable?
En último término, el mejor regalo que puedes desear para alguien es esa misma persona verdaderamente feliz. Amar a una persona es desearle el mejor bien posible, que es precisamente su felicidad. La verdadera, la que dura. Si haces un buen regalo a una persona lo que provocas en ella es una riqueza que la acerca a esa felicidad. No tanto una riqueza material, cuanto un movimiento de su persona en la dirección adecuada. Mueven las cosas, pero más aún los ejemplos. Mueven las palabras, pero más aún el testimonio. Por eso un viaje te puede cambiar la vida, porque ves con tus ojos otra manera de vivir, y puede que a la vuelta empieces a tomar decisiones mejor tomadas que antes.
Una frase en la dedicatoria de un libro puede hacerle más bien a tu amigo que el libro entero. Una foto que le recuerde qué es realmente vivir, y cómo ha sido de feliz cuando ha amado mucho y se ha dejado llevar por ese amor sin miedo, puede ser el mejor regalo de su vida. Rompe moldes. Sé creativo.
REGALA CON SENTIDO.
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